En el marco del Día Mundial de la Audición, celebrado ayer el 3 de marzo, reflexionamos sobre la importancia de cuidar nuestra audición, especialmente en las personas mayores. La pérdida de audición en las personas mayores es un desafío significativo que afecta a un porcentaje considerable de la población mayor.
Según las OMS, más del 80% de las necesidades en cuidado del oído y la audición continúan sin ser atendidas.
El Estudio Sociológico sobre Pérdida Auditiva en Mayores de 65 años realizado por MED-EL revela que en el estado el 30 % de la población entre 65-70 años ya presenta presbiacusia (pérdida gradual de la audición), cifra que asciende al 80% en aquellos mayores de 75. Este problema no solo afecta a las personas mayores, ya que se está manifestando desde los 50 años, en parte debido a la contaminación acústica y estilos de vida poco saludable.
El estudio también destaca que más del 45% de las personas mayores nunca ha revisado su audición, a pesar de que el 52% ha notado indicios de pérdida auditiva. Un 63,5% experimenta dificultades para oír, pero un 31% considera que la pérdida auditiva es una consecuencia inevitable de la edad, sin opción a tratamiento. Esto subraya la urgencia de un cambio de mentalidad respecto al cuidado del oído y la audición.
La pérdida de audición no solo impacta la capacidad de escuchar, sino que también conlleva consecuencias graves, como el aislamiento social y la aparición de demencia. Por eso, abordar estos problemas es esencial para mantener a las personas mayores activas, participativas y socialmente conectadas, mejorando así su calidad de vida y bienestar.
Zahartzaroa hace un llamamiento a la concienciación, enfocándose en mejorar la comunicación para abordar este problema que afecta significativamente su calidad de vida. Reafirmamos así nuestro compromiso constante con la construcción de un futuro donde el envejecimiento sea sinónimo de plenitud y felicidad.